Un turismo alternativo para adultos mayores – Parte II

Un turismo alternativo para adultos mayores – Parte II

¿Eres adulto mayor y sientes que tu experiencia turística es la misma, pero en destinos diferentes?

Parte II: Buscando una salida del protocolo 

Muchas veces para encontrar una solución alternativa a experiencias poco satisfactorias, debemos reconsiderar algunos supuestos. Por ello, te propongo revisar los siguientes.

  1. Recordando el formato “gira de estudio”, ¿crees que se puede aplicar íntegramente a grupos de adultos mayores?
  2. Si eres adulto mayor, ¿estás “condenado/a” a viajar en grupos numerosos? 
  3. Cuando piensas que a través de estos programas conociste muchos destinos, ¿en realidad los conociste o más bien visitaste algunos lugares de esos destinos?

Si todavía te identificas con el formato “gira de estudio”, te recomiendo continuar disfrutando de este tipo de servicios. Pero, por el contrario, si estás dudando que eso satisface tus reales necesidades, te invito a revisarlas para evaluar críticamente las distintas ofertas turísticas. 

Algo importante que debes tener en cuenta es que un tour (o recorrido) no necesariamente se puede convertir en una experiencia turística significativa, que satisfaga tus intereses. Dicho de otra manera, si lo que buscas son experiencias significativas, es muy posible que los tours se conviertan en un “premio de consuelo”. 

Una experiencia, es más bien una situación que impacta tus sentidos, tu mente y/o tus emociones y que se desarrolla en un entorno que potencia dicho impacto, con la compañía de personas que comparten el mismo interés y donde el servicio es entregado o guiado por una persona profundamente conocedora de lo que hace, quien deposita su atención en tu personade manera auténtica, no para cumplir un “protocolo”. Por ejemplo, una grata conversación con quien te está dando un masaje tailandés o, con quien te está enseñando a reconocer plantas medicinales un huerto o, aprender a bucear con la guía de alguien calificado/a.

Para ayudarte a la tarea de reordenar tus necesidades turísticas te planteo las siguientes preguntas:

  1. En cuanto a la interacción con los residentes, disfrutarías más ¿observando sus costumbres o interactuado con ellos para aprenderlas?
  2. Si tienes la oportunidad de llevarte un suvenir, ¿te gustaría participar en su elaboración?
  3. ¿Te gusta escuchar historias locales y disponer del tiempo suficiente para platicar, en una caminata o mientras preparan un alimento?
  4. Si clasificáramos las experiencias turísticas en aventura, deportes extremos, salud, bienestar, cultura y patrimonio, ¿qué prioridad le darías a cada una, según tus intereses?

Si lo que leíste te hizo sentido de alguna forma, te invito a dejar tus comentarios y a leer la segunda parte de este artículo: “Un turismo ad-hoc para adultos mayores”